Tengo en casa una caja llena de animalitos de plástico de colores, la heredamos de Nico, un niño demasiado mayor para animalitos de plástico. Si los dejas caer sobre la mesa quedan más o menos como en la foto:
Han hecho las veces de comida (lo reconozco, he desayunado elefantes de colores) o de personitas, han subido y bajado al coche -se han perdido unos pocos- y, en general, han acompañado los juegos de Julia el último año y medio. Así que cuál sería mi sorpresa cuando hace unos meses caminando por la calle caí en la cuenta que se trataba de unos materiales lógicamente estructurados. Para entendernos me refiero a unos materiales que responden a unas características (atributos) y que se combinan entre sí de todas las formas posibles (excluyendo que se te pueda perder un pato azul clarito). En el caso de los animales «lógicos» serían la especie y el color.
A partir de ese momento ya teníamos un juego más, clasificar por color o por animal ¿se acababan ahí los juegos? ¿cómo vamos a aprender «lógica» con materiales lógicamente estructurados?
Un primer juego que se nos ocurrió fue un dominó muy particular:
- se reparten las fichas, si son demasiadas, antes de repartir, quitamos algún color o especie.
- se juega en una sola dirección, no en dos como el dominó tradicional, aquí solo ponemos sobre el animal que ha puesto el último jugador.
- una vez que se pone el primer animal el siguiente jugador pone otro que sea del mismo color o de la misma especie (¡no puede ser las dos cosas!)
- El juego concluye cuando uno de los jugadores se queda sin fichas o no quedasen fichas que poner, en ese caso el ganador es el que tenga menos animales.
Son un conjunto de piezas de plástico o madera (los míos los compré en Dolmen, son de madera sin pulimentar y bastante económicos), con las siguientes características: tres colores (amarillo, azul y rojo), cuatro formas (cuadrado, rectángulo, círculo, triángulo) dos tamaños (grande, pequeño) y dos espesores (grueso y delgado).
Cuando se presenta un nuevo material hay que dejárselo a los chicos para que los manejen libremente. Por mi experiencia es seguro que tratarán de construir algo o dibujar formas planas: esto es genial, tienen que familiarizarse. A continuación hay que presentar las piezas dejando claro que tienen cuatro atributos: «rectángulo, grande, grueso y rojo» etcétera. Una primera actividad consiste en que nombren la pieza que se está mostrando y luego que lo hagan entre ellos. Lo siguiente podría ser el ya nombrado dominó (por equipos si son muchos) o la clásica «pieza escondida» que consiste en que un chico esconde una pieza y los demás tratan de adivinar cuál es, en una primera fase tocando las restantes y posteriormente preguntando por sus características (graduamos así la abstracción). Se pueden hacer, también, variantes sobre el dominó: jugamos en las dos direcciones o tratando en vez de con un cambio de atributo con dos o con tres (consejo: tres cambios de atributo son equivalentes a que sólo uno permanece igual, ¡pero no se lo digas! que lo descubran ellos.
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